ventanas

Ya no puede quedar demasiado tiempo para empezar a disfrutar de esas tardes en casa, viendo llover desde la ventana. Intuyendo el frío que hace fuera. Disfrutando de un té, un buen libro, una manta, un gatito acurrucado en el sofá, escribiendo este blog.

Aún debe quedar bastante tiempo para poder disfrutar de alguna de estas ventanas. Grandes, pequeñas o medianas.

Pero qué más da, lo importante es poder contemplar desde la paz de dentro todo lo malo que pasa fuera. Y que nada ni nadie pueda atravesar esas ventanas.

Fotos: Anthology Magazine