mi casa

Si esta fuera mi casa...

Yo también pondría alfombras inventadas, colocaría mis zapatillas sobre una bandeja de pasteles y tendría un burro de ropa en el salón, sobre el que colgar las dos últimas prendas que hubieran salido de mi máquina de coser.

Tendría una cabeza transparente con monedas pequeñas, para, al cabo de unos meses poder comprarme una de esas velas tan caras que hacen que tu casa huela tan bien.

Iría a Ikea a comprarme una balda Expedit blanca y la posaría sobre montones de revistas antiguas, en lugar de gastarme 9.95 euros en la mesa Lack.

Colgaría mis bailarinas Porselli que mi hermano me acaba de traer de Londres justo encima del lavabo, que a su vez estaría cuidadosamente instalado sobre una mesa que parece compañera de la famosa silla de los 60's Tolix.

Colgaría los cojines del techo de madera para no tener que quitarlos cada vez que quisiera meterme en mi blanca e impoluta cama, de la que me levantaría temprano cada mañana sin necesidad de despertador.

Si yo viviera en esta casa jamás pondría cortinas, persianas o cualquier cosa que impidiera que un solo rayo de luz quedase atrapado, a pesar de la atenta mirada de todo el quisiera mirar.

Imágenes: Elle Interior via Philip Karlberg